lunes, 5 de julio de 2021

PEINATE PARA LA FOTO


Por FRANCO PICATTO 

En una tarde donde la eficacia dejó de serle indiferente, Cambaceres derritió todo mapa de calor y no tuvo piedad para golear a Central Ballester en Ensenada. Fue un 6-1 que ratifica ese rumbo orientado hacia la regularidad apuntalada por una exhibición de superación y practicidad.

Le faltaba alinearse la corbata. Un sastre que pudiera acertarle a las medidas del arco y vestir de frac a este Cambaceres con brillo pero sin lustre en las últimas fechas.

Este “Rojo”fue haciendo un trabajo de confección y pudo lucir su mejor versión. La brújula le marcaba un norte y era consecuente en la idea de someter a su rival desde la presión, pudiendo usufructuar algunas situaciones generadas. Sólo faltaba completar esa última escala. Animarse y “arrimarse”, pero el domingo sumó una nueva faceta explorada: canalizar esas intenciones.

De punta a punta, los de Da Ponte supieron contrarrestar los tibios avances de Ballester y abrieron fuego con una capacidad goleadora asombrosa. Pero, hasta acá, la casualidad era que Cambaceres no concretaba en función de lo que generaba. Sin minimizar la tarea de sus rivales, la única oposición que encontraba este “Rojo” era cuando se enfrentaba a una falencia propia. Los testimonios de jugadores en este plantel intentaban descifrar esa pulseada entre efectividad y resultado.

Fluidez, concentración y optimismo. Sobre esas bases, este “Camba” priorizó un juego aplomado con algunos pasajes de fútbol vistoso. Ese temple lo llevó a revertir esa máxima futbolera que venía anulando al equipo:”los goles que no se meten en el arco rival, se sufren en el propio”. Ayer, retrucó esa frase con una costumbre que encontró sus frutos en los hábitos. Tras un empate con gol de tiro libre, Cambaceres respaldó el orden con un tono incisivo. Ahí ya habían despertado la voracidad goleadora. Goles que dan crédito. Vuelta al gol del “Poroto”García y tantos de los jugadores que habitualmente son recambio. En una tarde inspirada, “Camba” se empachó de goles.

La realidad del ascenso no luce tan difusa en el horizonte. Poder ser y parecer. Esta victoria reconforta pero además marca la pauta cabal del acierto reflejado en los resultados. Los jugadores y el cuerpo técnico van encolumnados detrás de una concepción y no renuncian a ese cometido, aún sin retrocesos en la campaña. El invicto continúa y la moral del equipo se encuentra por las nubes. El tiempo dirá si el flash final será celebrando un ascenso u otro desenlace. Pero Cambaceres ya se acomodó el traje de candidato. Luce alineado y con semblante saludable. Descifró la clave del gol, y en este torneo, eso vale tanto o más que ser coherente a un estilo. Tarde completa.