Un clima de bronca y de malestar
se vivió al término del encuentro. Los hinchas bajaron de la tribuna cabecera a
puro grito y se acercaron hacia la zona cercana a los vestuarios para hablar
con los jugadores y expresarles su preocupación por el rendimiento y los malos
resultados. Algunos de los equipistas salieron de los camarines y escucharon
los reclamos de los simpatizantes, participando de un intercambio de opiniones
durante algunos minutos.
Minutos después hubo una reunión
en camarines entre jugadores, cuerpo técnico y dirigentes. Analizaron el mal
presente en el torneo y coincidieron en que hay que redoblar los esfuerzos para
las fechas finales del certamen.