El regreso a la cancha de Midland, ubicada frente al cementerio de
Libertad, trajo recuerdos no gratos. Aún permanecía fresco el antecedente del
último encuentro. Aquellas cuatro puñaladas que cortaron una impresionante
racha de 15 encuentros sin derrotas y que dejaron al Rojo casi afuera del
Reducido. Una cancha históricamente inaccesible para Camba. El club de los
Orion se ponía, otra vez, en el camino de Defensores. Bastante público en el
estadio. Ya sin la tribuna detrás del arco,
la dividida hinchada local se ubicó
en las dos tribunas laterales. Tarde de lunes feriado, con todo este color
fotográfico:
