ROSARIO
(Especial).- El calor
fue protagonista en la tarde rosarina. 33 grados y una sensación térmica de 36,
en una tarde nublada y con escaso viento. La humedad superò el 60%. El
vestuario del Rojo era un “horno” y por eso los jugadores salieron rápido a
realizar la entrada en calor.Algunos
jugadores aprovecharon el riego artificial de estadio para refrescarse en la
previa, como se ve en la foto a Brian Martìnez. En cada etapa el àrbitro parò las acciones para que los jugadores se refrescaran.