Fue dirigente, representante en
AFA, aguatero, utilero. Fue un “todo terreno” del club, pero fundamentalmente
una gran persona. El Rojo fue su segunda casa y él siempre lo hizo
sentir así. Siempre dijimos no te vamos olvidar. Y no te olvidamos “Chocho”
querido. Hoy seguramente estarás en Juventud Unida, alentando desde un palco de
privilegio.