Los hinchas tomaron este encuentro de manera especial y
así lo hicieron saber en la semana. Se fueron autoconvocando en la previa, como
es habitual, en el barrio 5 de Mayo y así comenzaron a hacerse sentir desde la
mañana con las banderas y los bombos y redoblantes. Algunos simpatizantes
fueron más tempranos y colgaron todas las banderas con las clásicas
inscripciones sobre el alambrado de calle Quintana. Pero ya sobre el inicio del
encuentro, con la llegada de la hinchada, el sector se pobló de color y mucho
aliento. Y el recibimiento al equipo estuvo acorde a lo anunciado. Mucho humo de color rojo al son de los instrumentos, en un marco muy
festivo.