¿Hay que mirar la mitad del vaso lleno o la mitad del vaso vacío? El interrogante surge de un dato llamativo. Defensores sumó en Lujan el 13er encuentro que termina 0 a 0 en el año sobre 46 partidos jugados. La lectura es simple: habla de un equipo con solidez defensiva y notables problemas en la faz ofensiva. En ese punto vale mecionar, que Defensores solo pudo conseguir dos goles en los últimos once partidos jugados, en los que apenas pudo ganar un cotejo (Atlas como visitante por 1 a 0 y por un zapatazo de Coronel).
A su vez extendió la racha sin victorias a ocho juegos, con 5 empates (3 al hilo) y 3 caídas. Números contundentes de una campaña que no está a la altura de lo esperado.
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