No es fácil y no sé cómo se hace para despedir a un querido amigo. Nos dejó Daniel Benavente. Para muchos, el papá de Nahuel (ex jugador de Camba), socio del Rojo y el encargado de la obra del polideportivo en el “12 de Octubre”. Para quién escribe esto se fue un amigo entrañable con el que compartimos un montón de lindos momentos. Nos unía esa hermosa pasión que es el fútbol. Primero, fuiste el papá de Nahuel, pero con el tiempo, cuando ya nos conocimos, eras Dany, el amigo. Fueron muchos los viajes para seguir al Camba donde jugara. Inolvidable ese fin de semana en Rosario que culminó con el festejo de cara a la tribuna del estadio de Newell´s o aquellos días en San Luis para la Copa Argentina. Muchos partidos de fútbol compartidos del Rojo, de otros equipos o la Selección Nacional. Pero más allá de eso, un afecto entre las familias, disfrutando infinidad de reuniones sociales.
Dany tenía un sueño. Quería construir el Polideportivo en
Camba. No era por una cuestión económica simplemente. Quería sentarse en la
tribuna y decirle a su nieto “el abuelo hizo esta obra”. No llegó a ver el
anhelo concretado, pero seguramente ese legado lo continuará Nahuel.
Dany se nos fue físicamente, pero su don de gente y su
particular personalidad permanecerá por siempre en nuestros corazones.