El Estadio Municipal de Pilar era un escenario históricamente adverso para Defensores de Cambaceres. Desde su inauguración en 2004, el Rojo había jugado allí en cinco ocasiones y no había podido ganar. Cuatro veces enfrentó a Fénix, cuando jugaba como local en ese reducto, con tres empates y una caída. Y en el 2018 había visitado a Real Pilar, con una derrota por 2 a 1.
El de ayer su
primer triunfo en ese estadio.