Como parte de una cruzada que comenzó hace algunos años con
el platense Sebastián Gubia, el joven comenzó a entrenar hace pocos días con el
plantel de Defensores de Cambaceres.
La historia se incia cuando Gubia visitó Bangladesh, cumpliendo su promesa tras la victoria de nuestra selección por la última copa del mundo, en la cual vimos la pasión que despertó Argentina en ese país, recordando la que despertó Maradona en Nápoles. A raíz de la visita nacieron amistades y oportunidades, que le permitieron hoy a "Shadim" (como le dicen sus compañeros), entrenar con nuestro cuerpo técnico.
Desde el Rojo se señaló que “su adaptación es excelente y está muy contento de compartir esta nueva etapa en su vida futbolistica, ya que en su país jugaba en la liga profesional.
Cómo club social y deportivo, acompañamos y celebramos la
unión y el intercambio fraternal entre nuestro país y Bangladesh”.
Sebastián Gubia, quien tuvo la iniciativa de entablar la
unión entre ambas naciones, explicó: "Shadin es el primero que visita la
Región después de la cruzada Una promesa mundial, donde inauguramos ese puente
entre dos naciones que están unidas por la cultura del deporte. Está de visita
y, a través del deporte, descubre nuestra cultura y nuestra pasión, que es la
que ellos la sienten de alguna manera a tantos kilómetros de distancia".
Shadin reveló: "Mi vida en Bangladesh es estar con mi familia y fuera de eso juego todo el día al fútbol. Vivo para jugar bien al fútbol, vine para ser un buen jugador y además es el sueño de mi padre".
"Cuando jugué en Dhaka, Sebastián fue a visitarme con
la bandera de Maradona. Argentina es el país de mis sueños, pienso quedarme
unos dos o tres meses, tenemos con Sebastián una buena amistad y le dije que
venía a visitarlo”, detalló
Al explicar las
diferencias y similitudes, Shadin reveló: "En Bangladesh las cosas son
distintas, en este país podes tomar las cosas libremente y hay una apertura
mental".
"Al viajar por primera vez, se genera una carta de
reciprocidad a través de Gimnasia y del fútbol argentino. Ellos además de
conocer la cultura, quieren conocer el lugar donde yo vivo. A partir del idioma
del fútbol, él comenzó las prácticas en el Club Cambaceres. Nos enorgullece
saber que no fuimos los únicos locos que conocieron Bangladesh, sino que ellos
también vienen hacia Argentina para conocer", destacó Sebastián.