La tarde, como en el anterior partido de local,
estuvo fría. Pero eso no fue impedimento para que los hinchas del Rojo dijeran
presentes. Con el habitual color y aliento en la cabecera de calle Quintana y
con los simpatizantes que eligen la tribuna de cemento, pese a estar a la
sombra y sentirse más la baja temperatura.