Se terminó el torneo y es hora de
balance. Para el Rojo era todo un desafío. Venía de salir último en el campeonato anterior y no
podía dar un nuevo paso en falso. En medio de un presupuesto austero, llegó el
convenio con Gimnasia y el arribo de varios jugadores sin experiencia en la
categoría. Eran 19 fechas por delante donde la premisa pasaba por acoplar el
equipo, darle rodaje a varios equipistas y sumar la mayor cantidad de unidades
posibles, como decimos siempre, pensando a futuro.
A simple vista se puede decir que
no fue el mejor campeonato para Defensores ni alcanzó las unidades que hubiera
deseado. Los 22 puntos alcanzadas y el
12do. lugar en el torneo así lo certifican.
Pero tampoco fue tan malo como pintaba hasta hace algunas jornadas
atrás.
El cuerpo técnico que comanda
Fabián Lisa buscó una identidad y un funcionamiento como equipo.
Más allá de
los errores y los resultados, esa meta la alcanzó. “Camba” tuvo una idea de
juego y la fue plasmando a lo largo del campeonato. Con errores, con
limitaciones, es cierto, pero siempre propuso jugar, sea en la cancha que
fuere. La falta de experiencia en algunos de sus jugadores y jerarquía para
marcar diferencias le hizo dejar unidades en el camino que bien podría haber
conseguido. Camba pagó con derrotas los errores cometidos en las dos áreas.
Equivocaciones defensivas, en muchos casos, terminaron siendo goles del rival. La
falta de definición no le permitió inclinar algunos encuentros que en el juego
le habían resultado favorables.
Excepto el segundo tiempo contra Berazategui
y en grandes pasajes del cotejo como local contra JJ.Urquiza, el Rojo nunca fue
superado claramente por su rival de turno.
La propuesta, desde lo futbolístico,
fue interesante. Y se plasmó con mayor nitidez en el tramo final del
campeonato.
Las tres victorias sucesivas
fueron un bálsamo para una campaña que pintaba para ser mala. Y, lógico, fue la
ratificación de una propuesta futbolística que empezó a dar frutos hacia el
final.
De todas maneras, el árbol no
debe tapar el bosque. Todos son conscientes de que no se pueden quedar con
estos últimos resultados. ¿Hay una base? Sí. ¿Hay una idea de juego que prendió
en el plantel? Totalmente. Pero lo que
viene será muy duro. Este grupo deberá
cargar con la mochila de pelear con el promedio durante todo el torneo.
Arrancará de muy abajo en esa tabla y, por consiguiente, ya no hay margen de
error. Todos saben que hay que reforzar a este plantel con nombres que sean de
la categoría y que le otorguen un salto de calidad. El gran interrogante es
cómo hacerlo, teniendo en cuenta la escasez de recursos económicos con que
cuenta la institución.
Defensores necesita de todos los
sectores. Es una realidad que está debilitado desde lo dirigencial. Son muy
pocos los directivos que están comprometidos. Hay un montón de carencias. Y así todo se hace más difícil. Todos los que
quieren al Rojo de verdad tienen que darse cuenta de que no pueden estar al
margen de esta situación. Que en pocos meses habrá que salir a defender la
permanencia en la categoría como primer objetivo. Y si todos no están consustanciados
con esa idea será muy complicado.
Se impone un gran llamado a todos
los sectores. Hay que conseguir recursos para sobrellevar esta situación. Se
necesita dejar las diferencias de lado, construir todos juntos por el bien de
la institución e ir por una meta común. Ojalá sea posible que todos tomen
conciencia de ello. Es el gran desafío ante el panorama que se avecina.