Y resulta muy llamativo el duro castigo que le impuso a
Tomás Squie, que fue de 5 jornadas (ya cumplió una). En el informe se señala “doble
amonestación y agravios reiterados al árbitro”.
También fue dura la sanción a Gerónimo Rodríguez, a quien le aplicaron 3 fechas (cumplió una) por “codazo sin pelota”.
Mientras que Rodolfo Fernández, expulsado el lunes contra
Central Ballester, recibió una jornada y no podrá estar el domingo contra
Lugano.
Para ver la notable desigualdad que existe con los castigos
a los jugadores de Primera, especialmente cuando se trata de clubes
importantes, tras el escándalo en River-Boca, la mayoría de las sanciones
fueron de un partido.