Un
inmenso operativo de seguridad, fuera de lugar por la trascendencia del
partido, motivó un enorme malestar de todos los que asistieron hoy al “12 de
Octubre”. 53 efectivos policiales, personal de Infantería, gente del APREVIDE
con el mismísimo Lugones a la cabeza y miembros del operativo “Tribuna Segura”
se apostaron en el ingreso al estadio como
se tratara de un Boca-River.
Se
impidió el ingreso de gente mayor con bicicletas, con bebidas gaseosas, termos
y todos aquellos que no estuvieran en los
listados correspondientes o no
presentaran su carnet de socio con cuota al día. Hubo periodistas, familiares
de jugadores y hasta alcanza pelotas que tuvieron inconvenientes para ingresar
a la cancha, en un operativo desproporcionado y abusivo. Hubo gente que debió
devolver el bono y regresar a sus casas. Hasta también se informó desde la
comisaría Primera de Ensenada de la detención de Matías Segovia, secretario de
prensa del club, por figurar desde hace más de dos años en un listado de
derecho de admisión.
Muchos
socios se quejaron y expresaron su malestar por el excesivo rigor puesto de
manifiesto por las fuerzas de seguridad, totalmente atípico en un partido de la
Primera D y de esta escasa trascendencia.