Históricamente, la cancha de
Liniers fue incómoda para el trabajo de la presa. Muchas veces los bancos de
suplentes hicieron de plataforma para que las radios y los camarógrafos
desarrollaran su trabajo. Pero esta situación varió en el último tiempo. Hace
poco culminó una platea de cemento en uno de los laterales y luego agregó otra
obra significativa: construyó las primeras cabinas con que cuenta el “Juan
Antonio Arias”.