No suele pasar que un equipo que tiene dos jugadores más durante media hora y con el encuentro igualado no termine ganando. La superioridad numérica, por lo general, termina inclinando la cancha a favor, especialmente por los espacios que se abren y por el desgaste físico del equipo en merma. No siempre pasa y lo sufrió el Rojo en carne propia el último sábado en Mercedes. Con media hora por delante, y 11 contra 9, no pudo ni supo quebrar a su rival.
El dato estadístico señala que no es la primera vez que le ocurre desde que perdió la categoría. Hay otro antecedente: ocurrió el 15 de abril de 2019. Ese día jugó en el “12 de Octubre” frente a Atlas. A los 37 minutos fue expulsado Arriagada en la visita y otra roja se produjo a los 22 minutos para Julio Gauna, también del Marrón. Sin embargo, el Rojo no pudo pasar del 0 a 0 como el último sábado. En dicho torneo, concluyó en la última posición.
