Muy poca gente asistió al estadio “Ciudad de San Miguel” para presenciar
el encuentro. El impresentable horario de las 13, en pleno festejo del “Día de
la Madre”, le restó mucho público al encuentro. No más de 150 personas
presenciaron el partido. La barra del local legó con el partido comenzado en
poco número y con algunas banderas, trompetas y bombos. ¿Quién programa los
partidos en estos horarios sin el más mínimo sentido común?