La
séptima división no pudo coronar su gran campaña con la vuelta olímpica y desatar
un gran festejo en la modesta cancha del complejo Don Orione. Los chicos no
pudieron en la finalísima frente a
Sportivo Dock Sud, cayendo 2 a 1, en un cotejo muy parejo.
Las
lágrimas y el desconsuelo del final no opacan una destacada labor durante todo
el año.
Hubiera
sido un merecido premio a un trabajo serio y al sacrificio que pusieron los
chicos, pero este debe ser el futuro de la institución.
La
final no dejó de exhibir las características que tienen este tipo de
encuentros. Fue un partido trabado, cerrado, con mucho nerviosismo y de dientes
apretados. Dentro de ese contexto, Dock Sud sacó provecho al comienzo del partido
para ponerse en ventaja, pero diez minutos después llegó el empate de Orlando
Chaparro. Camba, preso de sus nervios, no pudo desplegar su mejor fútbol y todo
se hizo muy luchado y friccionado.
Mucho
más en el segundo tiempo, donde las situaciones de gol escasearon. Parecía que
los penales iban a definir el campeón, pero un tiro libre fortuito le dio al
Docke el triunfo y el título.
No
pudo ser para el Rojo, pero aplausos igual por este subcampeonato.
La formación fue con La
formación del equipo de Gastón Mansilla fue con: Santiago Bulhman; Rodrigo
Cordero, Diego Berrocal, Francisco Zamora y Valentín Tobes; Ezequiel Martínez, Matías Raitelli y Santino Valentini; Caetano
Landa, Rolando Chaparro y Agustín Kees. Luego ingresaron Valentín Funes, Matías Domínguez y Juan Marín.
