El operativo de control del COPROSEDE en la cancha de Cañuelas fue riguroso. Sólo pudieron ingresar directivos debidamente identificados en una lista y la prensa acreditada. Cuando promediada el primer tiempo, la Policía hizo retirar a algunas personas que debían estar en la tribuna y también vimos como dejaba el lugar el técnico de Lamadrid (próximo rival de Merlo), Jorge Franzoni.
Asimismo, un grupo de jugadores suplentes de Merlo vieron el partido subido al techo del colectivo que los trajo a Cañuelas, ubicado fuera del estadio.
Asimismo, los dirigentes de Defensores hicieron cuentas y vieron el balance en Rojo: 15 policías fue el operativo que tuvo un costo de 450 pesos; 1500 pesos fue el costo del alquiler del estadio; y 600 pesos hubo que desembolsar para la ambulancia. A eso hay que sumarle unos 2.000 pesos que se perdió de ganar en concepto de recaudación por venta de entradas. Por suerte, el traslado se hizo en el ómnibus que cedió sin cargo la Municipalidad de Ensenada. Todo a pura pérdida, consecuencia del accionar un grupo de irresponsables que dicen llamarse hinchas.
Asimismo, un grupo de jugadores suplentes de Merlo vieron el partido subido al techo del colectivo que los trajo a Cañuelas, ubicado fuera del estadio.
Asimismo, los dirigentes de Defensores hicieron cuentas y vieron el balance en Rojo: 15 policías fue el operativo que tuvo un costo de 450 pesos; 1500 pesos fue el costo del alquiler del estadio; y 600 pesos hubo que desembolsar para la ambulancia. A eso hay que sumarle unos 2.000 pesos que se perdió de ganar en concepto de recaudación por venta de entradas. Por suerte, el traslado se hizo en el ómnibus que cedió sin cargo la Municipalidad de Ensenada. Todo a pura pérdida, consecuencia del accionar un grupo de irresponsables que dicen llamarse hinchas.