En la previa del partido, Hugo
Castillo se paseó con una maceta donde ubicó un trébol con cuatro hojas. “Una
vez en cancha de Almagro pasó algo parecido y terminamos ganando”, recordó al
pasar el dirigente que peina canas. Pero esta vez no funcionó como amuleto de
la suerte. A su lado, Juanchi Guerra manifestó que hacía diez años que no
concurría a ver un partido de Defensores como visitante.