No había motivo para sufrir hasta la última jugada, hasta esa salvada del Dibu Martinez. El 2 a 1 final es un resultado mentiroso que no refleja la amplia superioridad demostrada por Argentina, especialmente en el segundo tiempo. Pero lo importante es que se dio otro paso y Argentina está en los cuartos de final.
El once de Scaloni fue de menor a mayor. Le costó el primer tiempo pero el gol de Messi le simplifico las cosas. Le dio la tranquilidad necesaria. En el segundo tiempo se vio la mejor versión. Julian Alvarez aprovechó un error del arquero y pareció sentenciar la historia. El tercer gol estuvo cerca, pero una jugada fortuita determinó el descuento del elenco de Oceanía.
Argentina debió ganar con mayor holgura. Lo valioso es que sorteó una nueva instancia y ahora se viene Países Bajos, el viernes a las 16.