Hay personajes que merecen contar sus historias en Defensores de Cambaceres. Gente que, desde el anónimato, ha dado mucho por la institución y durante varios años. Enrique Da Silva llegó en 1986 al Rojo y ya lleva 26 años en el club. No es jugador, no es técnico, no es dirigente, pero ha hecho de todo por el club. Desde canchero, sereno y un sinfín de actividades. Su historia merece conocerse: