Un fuerte olor nauseabundo se pudo percibir durante toda la mañana en el
reducto de JJ. A pocos metros del lugar, en el camino del Buen Ayre, se encuentra un lugar para volcar residuos. Y
como el viento soplaba hacia este lado, nos hizo acordar a lo que habitualmente
ocurre con el CEAMSE, en Punta Lara.