Se
había ausentado en los primeros partidos del año. Raro en él, que no suele
perderse oportunidad de seguir a su querido Rojo por cada escenario donde le
toca jugar. Pero en la cancha de Deportivo Merlo reapareció. Néstor Romero
salió temprano desde Adrogué, tomó varios colectivos y trenes, y se hizo
presente en el Parque San Martín. Allí junto a la delegación visitante, estuvo
atento a cada movimiento de su querido “Camba”. Y al final se fue preocupado como todos.