La crónica dirá que el Rojo hizo un aceptable práctica de fútbol frente a un equipo de Primera División y no perdió. Fue 0 a 0 el amistoso frente a los titulares de Gimnasia, en Estancia Chica, al cabo de intensos 45 minutos de fútbol. Una multitud estuvo presente en Abasto. Más de 1200 personas ocuparon todos los sectores de la cancha principal y siguieron atentamente el desarrollo de las acciones. Y también hubo hinchas de “Camba” entre los asistentes con ganas de ver a su equipo.
Tal como estaba previsto, Guillermo Barros Schelotto no hizo fútbol esta mañana, aunque efectuó trabajos de gimnasio y robó las miradas y el afecto de los presentes.
La idea del Rojo fue muy clara: jugar ordenado y con las líneas bien apretadas, sin dejar espacios y cerrando los caminos hacia el arco de Arias Navarro.
Como era de esperar, Gimnasia se adueñó de la pelota y la hizo circular de un lado hacia otro. Asumió la iniciativa, pero no llegó en la medida esperada. Sí, tuvo las mejores chances. Un cabezazo de Fontanello contra un palo que desvió Arias Navarro y un salvada providencial en la línea de Calabrese cuyo balón dio en el travesaño, fueron las más notorias.
El Rojo casi se queda con la victoria cuando Benavente sorprendió desde lejos y su disparo dio en el travesaño.
En Defensores jugó Nicolás Kissner, quién se las ingenió para generar alguna chance. Tuvo un remate que tapó Monetti y otro que se fue desviado.
En líneas generales, fue una práctica positiva. No perder contra un equipo superior siempre es un aliciente y sirve como medida para ir progresando y encontrar rodaje futbolístico.
Los equipos alistaron de esta manera:
GIMNASIA: Monetti; Casco, Fontanello, Agüero y Sapeti; César González, Capurro, Aued; Neira, Pacheco y Vizcarra. DT: Ángel Cappa.
DEF. CAMBACERES: Arias Navarro; Calabrese, Ruscitti, Carreño y Oleiro; Ladogana, Jones, Benavente y Ricardo González; Maximiliano Benítez y Kissner. DT: Alejo Santa María.
Tal como estaba previsto, Guillermo Barros Schelotto no hizo fútbol esta mañana, aunque efectuó trabajos de gimnasio y robó las miradas y el afecto de los presentes.
La idea del Rojo fue muy clara: jugar ordenado y con las líneas bien apretadas, sin dejar espacios y cerrando los caminos hacia el arco de Arias Navarro.
Como era de esperar, Gimnasia se adueñó de la pelota y la hizo circular de un lado hacia otro. Asumió la iniciativa, pero no llegó en la medida esperada. Sí, tuvo las mejores chances. Un cabezazo de Fontanello contra un palo que desvió Arias Navarro y un salvada providencial en la línea de Calabrese cuyo balón dio en el travesaño, fueron las más notorias.
El Rojo casi se queda con la victoria cuando Benavente sorprendió desde lejos y su disparo dio en el travesaño.
En Defensores jugó Nicolás Kissner, quién se las ingenió para generar alguna chance. Tuvo un remate que tapó Monetti y otro que se fue desviado.
En líneas generales, fue una práctica positiva. No perder contra un equipo superior siempre es un aliciente y sirve como medida para ir progresando y encontrar rodaje futbolístico.
Los equipos alistaron de esta manera:
GIMNASIA: Monetti; Casco, Fontanello, Agüero y Sapeti; César González, Capurro, Aued; Neira, Pacheco y Vizcarra. DT: Ángel Cappa.
DEF. CAMBACERES: Arias Navarro; Calabrese, Ruscitti, Carreño y Oleiro; Ladogana, Jones, Benavente y Ricardo González; Maximiliano Benítez y Kissner. DT: Alejo Santa María.
ARBITRO: Marcos Ortigoza.-