Defensores de Cambaceres consiguió un punto que le permite volver a
sumar luego de 3 fechas. Fue 0-0 visitando a Sportivo Italiano, equipo que
llegaba con la misma obligación de ganar ante el flojo rendimiento que mostró
en las últimas fechas. Los dirigidos por Abeledo fueron acrecentando su nivel
de juego con el correr del cronómetro, pero la falta de precisión ante algunas
chances claras de gol no le permitieron coronar de la mejor manera la noche de
este lunes.
Dos cambios se vieron en el once titular, que resultaron esenciales para
que el equipo mejore la imagen dada con respecto al encuentro frente a J.J.
Urquiza. La entrada de Benavente por Gutiérrez y de Molina Rios por Gambetta le
otorgaron más seguridad al equipo, principalmente para la labor en la defensa.
En su primera línea, el Rojo mostró firmeza y no se vio forzado a errores ante
el exceso de pelotazo del local, que encontró su mejor dominio y juego en los
pies de Heredia, pero sin lograr reiteradas situaciones claras de gol. Lobato y
Goicoechea fueron quienes más se destacaron en este sector, logrando intervenir
de manera efectiva ante los ataques del rival y siendo otra alternativa de salida
por el sector izquierdo, respectivamente.
Por el círculo central se vio el mejor material durante el partido. La
zona media continua siendo la parte fuerte del equipo, tanto por las acciones
individuales como por la conexión y eficacia que se logra entre los jugadores.
En este encuentro, se pudo ver una gran actuación de Daniel Cardozo, que
durante los noventa minutos fue una de las piezas claves para frenar junto con
Molina Rios el avance rival y ser una de las fuentes de armado de juego
ofensivo, hasta permitiéndose una chance de gol, pero su remate fue desviado
por el arquero Hourcade.
Ya en el complemento fue cuando acrecentó el volumen de juego de ambos
equipos, pero la falta de definición hacia los tres palos no permitieron que se
abriera el marcador. A pesar de ello, Camba mostró una imagen positiva en su
ataque, con un Nicolás Kissner más participativo en la lucha dentro del campo
local, ante una defensa floja y desmotivada por la presión ejercida desde el
público, eufórico por conseguir un triunfo. La entrada de Gustavo Azcona por
Ricardo Gonzalez no sólo generó un cambio táctico sino que, además, le otorgó
más movilidad y llegadas de peligro al grupo, demostrando que es en este
momento, a pesar de haber estado inactivo por su lesión, parece ser el
compañero ideal de Kissner en la delantera.
Cambaceres mostró una mejor imagen tanto en lo anímico como en lo
deportivo, pero aún le resta consolidar y equilibrar en un mismo encuentro la
labor de todas sus líneas para poder conseguir el deseado triunfo. La próxima
fecha deberá recibir a San Miguel, que está obligado a sumar para no correr
riesgo en la tabla de Promedios.
Por Valeria Saucedo