No hay fútbol, otra vez. Los futbolistas se fueron a las
21.40 de la sede de Agremiados en silencio. Casi todos, salvo el Poroto Cubero,
quien anticipó al pasar que no iban a arrancar el torneo: "Es
solidarizarse con los jugadores de fútbol... no hay fútbol, hasta que no esté
la plata en la cuenta de los jugadores no se va a jugar". Fueron más de
dos horas de reunión, entre las 19 y las 21.40, en la que pasaron muchas cosas.
Fue largo el encuentro entre los referentes, quien finalmente decidieron seguir
con la firme postura de no comenzar el torneo.
La historia este jueves arrancó tempranito, con el Gobierno
avisando que había depositado el dinero (350 millones de pesos). Y hasta
mostrando la documentación. A lo largo de todo el día fueron apareciendo los
distintos dirigentes presionando para que se juegue, desde Hugo Moyano hasta
Nicolás Russo y Ceferatti de Central. Todos argumentando la plata pagada por el
Gobierno para saldar la mayor parte de las deudas. Pero no alcanzó. Y en
Agremiados, con Sergio Marchi a la cabeza, los jugadores siguieron en la línea
de no arrancar.
Salieron en silencio. Referentes como Gago, Ortigoza, Maxi
Rodríguez... Había muchos de Primera y también del Ascenso, pero el único que
confirmó la decisión fue Cubero, el experimentado jugador de varias batallas en
Vélez.
Godoy Cruz viajó a Rosario, Belgrano llegó a Buenos Aires
con su capitán advirtiendo que iba a ser muy difícil que se jugara. Hasta desde
AFA surgió la información de que los equipos debían presentarse, que si no se
les iba a descontar puntos. También hubo una conciliación obligatoria del Ministerio
de Trabajo. Nada de eso movió a Agremiados y los jugadores. Y no se juega...
FUENTE: Ole