El 2016 arranca con interrogantes para Defensores de
Cambaceres y lleno de desafíos. Claramente el objetivo central será olvidar un
pésimo 2015 donde realizó una de las peores campañas de su historia.
Sobre ese antecedente, todo lo que pueda realizar este año
ya será mejor. Es imposible imaginar algo similar o peor. Ya estaríamos
hablando de una catástrofe deportiva y nadie quiere pensar en eso.
A sólo cinco días de reiniciar los entrenamientos y a poco
más de un mes de comenzar el primer torneo del año, por ahora son más los
interrogantes que las certezas que hay en el equipo que este año comandará
Fabián Lisa, tras el acuerdo con Gimnasia.
Mientras varios conjuntos de la categoría van reforzando sus
planteles, en el Rojo por ahora no hay
grandes novedades. Se sabe que llegarán
algunos juveniles de cuarta división de Gimnasia y no mucho más. El cuerpo
técnico y los dirigentes están hablando y sondeando la posibilidad de refuerzos
pero aún no hay nada seguro. Lo único cierto es que al plantel de floja labor
del año pasado se le fueron nombres de peso y de experiencia: Rosa Zacarías,
Benavente, Landa, Kissner, Jones. Y está claro que el equipo necesitará de la
llegada de nuevos jugadores. Todo dentro de un contexto económico que no es
ideal ni mucho menos para el Rojo. Habrá que ser muy preciso y acertar en los
refuerzos con una billetera escasa de recursos. Los próximos días serán de
novedades, de vuelta a los entrenamientos y de armado del plantel. Una vez que
el mismo se conforme ahí tendremos una idea para que puede estar Defensores
este año. Por lo pronto, estará obligado a sumar para no sufrir en el futuro.