jueves, 11 de agosto de 2016

CAMBACERES "GASOLERO" Y TRABAJADOR

En medio de la confusión de la AFA, que sigue sin girar dinero, el plantel del Rojo levantó la medida de fuerza. El presidente pintó un panorama de “incertidumbre”

Solos, en silencio y un día antes de lo previsto, regresaron al trabajo los jugadores de Cambaceres. “Los muchachos volvieron para no desperdiciar la buena pretemporada que estaban realizando en doble turno, pero la realidad es que atravesamos un momento muy difícil”, señaló Raúl Onofri, presidente del Rojo.

La Asociación del Fútbol Argentino lleva tres meses sin girar el dinero correspondiente a los clubes del ascenso y la dirigencia de la entidad de Ensenada no puede pagar desde mayo.


“Lo que nos ofrecen es menos de lo que nos daban antes, y así es imposible. Como mínimo tendrían que darnos $100.000, para que nosotros, con lo que juntamos por publicidad, tengamos lo suficiente para afrontar el año y no estar en déficit. No sé de dónde vamos a sacar plata”, se quejó Onofri en diálogo con este diario.

Corriendo a la deriva

“No lo soñé…”, cuenta el estribillo de una famosa canción de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, banda de rock plagada de adeptos en las tribunas del ascenso. “Ibas corriendo a la deriva”, continúa el tema (JiJiJi), como si supiera la condición de los muchachos que militan en los clubes de la B Metropolitana, “C” y “D”.

Por esto, no solamente Cambaceres frenó en su momento los entrenamientos. También lo hicieron sus vecinos de San Carlos y San Telmo (el que se animó a parar primero).

Las zozobras económicas pasaron a los hechos, aunque de a poco la situación deportiva se fue normalizando (no por garantías de AFA, que nunca llegaron, sino por el sentido común de los jugadores de hacer un esfuerzo más... de tantos).

Los de Fabián Lisa habían levantado campamento el viernes pasado con la intención de regresar este miércoles (ayer), pero se anticiparon y el grupo volvió a entrenarse el martes. “Se están dando una mano entre todos”, alentó Onofri, de 71 años.

Una cuota de 50 pesos y una masa societaria de 1.000

La “ayuda externa” es vital para Cambaceres, según explicó  a Hoy Raúl Onofri. Algunos comercios ya aportaron un mes, pero Ensenada es chica y no “hay demasiados a los que se les pueda pedir plata”.

Los problemas involucran el pago del plantel y también el de los colaboradores de la entidad.

Según Onofri, “en la sede tenés gastos fijos de cerca de $5.000 y hay que sumar otro poco de la luz y el gas de la cancha, lo que estaría dando $6.000 mensuales de erogación”.

La cuota societaria es desde hace dos años de $50 y, si bien hay un mandato asambleísta para poder aumentar, están tanteando la situación social.

Una pérdida de adherentes al fútbol se produjo en aquellos períodos en que el club no pudo usar la localía o debió jugar a puertas cerradas.

FUENTE: Diario Hoy