Los hinchas del Rojo esperaron al
plantel en la rotonda de 120 y lo escoltaron por el camino Rivadavia en motos,
autos y hasta un camión. El ómnibus ingresó por el nuevo camino que pasa frente
al cementerio municipal e ingresó en el barrio 5 de Mayo. Allí un grupo
numeroso de hinchas no paraba de saltar y festejar. Entonces los jugadores bajaron
del colectivo y se pusieron a saltar y
a festejar a la par de ellos. De allí siguieron hasta la puerta de la cancha, donde aguardaban algunos familiares a pura alegría. Así los equipistas fueron a buscar sus vehículos particulares para ir a celebrar a la intimidad de sus hogares.
a festejar a la par de ellos. De allí siguieron hasta la puerta de la cancha, donde aguardaban algunos familiares a pura alegría. Así los equipistas fueron a buscar sus vehículos particulares para ir a celebrar a la intimidad de sus hogares.