Hay fe y optimismo. Nadie da por perdido ninguna batalla. Y
Defensores de Cambaceres no bajará los brazos mientras las matemáticas den. Es
lo que se puede palpar entre los protagonistas de cara a la definición del
campeonato. Todos saben que es difícil y que no solo depende de lo que haga el
Rojo. Pero hoy pudo notarse un buen ánimo en el entrenamiento.
La idea es estar lo más concentrado posible y ganarle a
Laferrere. Es la primera meta, la única que está al alcance de los
protagonistas. Y después sí esperar un mano de El Porvenir. Pero nadie da por
perdido nada. Al menos, el Rojo ya avisó que luchará hasta el final.
Hoy trabajó con intensidad en la parte física y
táctica y no
habrá grandes novedades en la semana. Estará la ansiedad y el nerviosismo lógico
con el correr de los días. La palabra “desempate” la pronuncian varios
protagonistas y es una chance. Al menos la chance a la que se aferra el Rojo
por estas horas.