Frustración y amargura. No pudo ser. El sueño del ascenso se derrumbó en noventa minutos. Defensores de Cambaceres no le pudo ganar a Centro Español, empató 0 a 0 y se quedó afuera de la gran final. Llegaba a esta revancha de la semifinal en desventaja y obligado a derrotar a este incómodo rival que era Centro Español. Debía hacerlo por dos goles. Había temores y dudas. No era una tarea sencilla, ni mucho menos. El equipo de Da Ponte tenía que dar una muestra de carácter y de inteligencia. Se jugaba todo el esfuerzo de un año en noventa minutos. Y el equipo no respondió como lo hizo durante la temporada. Le costó imponer su juego, pocas veces pudo poner en aprietos a su rival y terminó en medio de un profundo lamento. Suena muy injusto después de la gran temporada que hizo, de haber sido primero en la general y de haber perdido solamente dos partidos en todo el año. Es muy injusto. Pero estas definiciones son así. Los merecimientos no importan. Son para aquel conjunto que se equivoca menos y en esta serie de 180 minutos fue Centro el que cometió menos errores.
Con nuevo
esquema táctico, con tres hombres en el fondo, con Squie siendo salida por la
izquierda, Da Ponte buscó sorprender a Centro, tratando de presionarlo desde el
minuto cero. Pero el objetivo no lo pudo cumplir. Porque el Rojo fue un rival
impreciso, que tuvo muchos inconvenientes para generar juego y quebrar el cerrojo
defensivo que le propuso su rival.
Un disparo de
Coronel de media distancia cerca del palo derecho y un cabezazo de Rosas
Quintero fueron las pocas situaciones generadas por el Rojo.
La visita nunca
se apartó de su libreto. Demoró cuanto pudo el juego y le cerró los caminos a
Camba. Tuvo una sola chance clara cuando Smarra, entrando por derecha, falló
frente a Volpicello.
Se esperaba que
en el segundo tiempo, Defensores tratara de imponer su juego y se lo llevara
por delante al rival, aún con garra y entrega. No ocurrió ello. Todo le costó
demasiado al equipo de Da Ponte, que no podía hilvanar situaciones de riesgo y
un juego asociado como fue su sello durante el año. El reloj fue un enemigo
letal, ya que ha medida que fueron pasando los minutos, el nerviosismo por el
gol que no llegaba aumentó.
Lo tuvo en el
final con un disparo de Loyola que dio en el travesaño y se elevó.
La desilusión y
la frustración se apoderaron del cierre en el “12 de Octubre”. Los aplausos de
los hinchas, premiando una gran temporada, no alcanzaron a contener tanto
desconsuelo.
DEF.CAMBACERES:
Lautaro Volpicello; Jorge Rosas Quintero, Julián Loyola y Gerónimo
Rodríguez; Tomás Bravo, Esteban Coronel (cap), Leonel García y Tomas Squie;
Sebastián Ferrario; Sebastián Ybares y Elías Torancio.
Suplentes: Camilo
Crozzolo, Juan M. Díaz, Alejo González, Rodolfo Fernández, Tomas Yorio, Nicolás
Ferreira y Diego Martínez. DT: Carlos Da Ponte.
CENTRO
ESPAÑOL: Gianluca
Albano; Franco Grillo, Enzo Pare, Facundo Ponce e Ignacio Brazuna; Emanuel
Castañeda (cap), Ezequiel Spinella, Mauro Smarra Vargas y Nicolás López; Ramiro
Reynoso y Franco Cichero.
Suplentes: Agustín Forgaral, Eleazar Maciel,
Mauro Olivetti, Roldán, Alan Acevedo, Ramírez y Maximiliano Saura.
DT: Diego Herrero.
CAMBIOS: ST al inicio Acevedo por Espinella
(CE); 12´ Ferreira por Leonel García y Díaz por Squie (DC); 17´ Roldán por
Cichero (CE); 29´ Diego Martínez por Bravo (DC); 36´ Ramírez por Nicolás López
(CE); 37´ Yorio por Gerónimo Rodríguez
(DC); 45´ Maciel y Olivetti por Smarra y
Reynoso (CE).
AMONESTADOS:
En Def. Cambaceres,.Rosas Quintero, Coronel, Leonel García, Ybares y
Bravo. En Centro Español, Grillo, Spinella y Ramírez.
ARBITRO: Catrián Peralta (mal)
ASISTENTES: Jesús Ochuzzi
- Carlos Otegui
CUARTO ARBITRO: Diego Torres
CANCHA: “12 de Octubre” Def. Cambaceres (mala)