Martín Zuccarelli, que el domingo dejará la dirección técnica del Rojo, señaló que “la renuncia es indeclinable. A pesar de los esfuerzos reiterados que hicieron por convencerme tanto el presidente de la institución, como los dirigentes más importantes y posteriormente los jugadores. Creo que Cambaceres necesita cambiar de aire y renovarse. Esto le va a hacer muy bien al plantel y al club, a pesar de que confío a muerte en los jugadores".
Agregó que “de este club, de su comisión directiva y de los jugadores te tengo que decir que son impresionantes. Pero ya no soy el técnico. Teníamos tanto apoyo, tanta resistencia, que nos costó convencerlos de que nos teníamos que ir. Les ofrecí la posibilidad de dirigir el domingo debido al respeto, porque no manejaban otra alternativa que no seamos nosotros, y esto, en un fútbol histérico como el que nos toca vivir hoy, vale mucho. Se han comportado muy bien. Pero en el fútbol nosotros debemos pensar con la cabeza y no con el corazón”.
Por último dijo que “no creo que haya sido un mal paso, para mí fue una experiencia positiva, crecí mucho en lo profesional, me sentí respaldado por jugadores y directivos y porque en la cancha, si bien no convertíamos, se desplegaba todo lo que se trabajaba durante la semana”.-