Cuando los dirigentes de Defensores de Cambaceres se enteraron del cambio de estadio, intentaron modificar la decisión pero ya era tarde. Hace más de quince días estaban advertidos de que esto podía pasar. Pero parece que se durmieron en los laureles y las infructuosas gestiones realizadas a último momento no surtieron efecto. En las últimas horas, trascendieron algunos detalles de la reunión que mantuvieron ayer por la mañana con el Capitán de Ensenada, Marcos Patelli.
Estuvieron el Ingeniero José Riccione, Rodolfo Pirrone y el tesorero Héctor Nasello. Buscaban un acercamiento con las autoridades policiales y rever la decisión del cambio de cancha. Era la primera reunión con el nuevo comisario. Tarde, si se quiere, ya que este partido de la Promo se sabía desde hace un mes que se jugaba el 23 de junio. Riccione le habría dicho al jefe policial que “tenemos que jugar en Ensenada por cábala, ya que en la cancha de Gimnasia perdimos siempre”. Pero la frase más llamativa del Ingeniero habría sido la siguiente: “Mire comisario, tenemos que hacer lo posible para que el partido se juegue en Ensenada sino nos matan a todos. Después no interesa si Cambaceres no juega más en Ensenada, total yo me voy del club”. Los presentes en la reunión no salían de su asombro y hasta alguno habría esbozado cierta réplica a lo que dijo Riccione.
