Ismael Villalba, el atacante que
llegó en esta temporada al Rojo, tiene su pasado y sus afectos en Cañuelas. En
esa entidad se inició futbolísticamente y en esa ciudad está radicado. Por eso
no extrañó que fuera muy saludado por allegados y socios del equipo local. Lo
trataron con mucho afecto y, además, le colgaron una bandera que decía: “Isma
Comita Villalba. Gracias por todo. La 83 siempre a tu lado”.