Por Jorge Daniel Testori
El barrio surgió en el entorno portuario como guarida de los obreros que excavaron y construyeron el puerto entre 1883 y 1891, un apiladero de casetas de madera y lienzo, raramente con ladrillos y formaban un verdadero campamento de trabajo.
Las viviendas mas organizadas de madera y chapas datan después del año 1895 encolumnadas junto al canal lateral oeste en el sentido transversal.
Barrio residencial con pocos comercios y algunos depósitos y galpones conforman esas 14 manzanas conectadas por pasajes que confluyen en la calle longitudinal Gaggino (ex Río de la Plata).
Son unas 132 viviendas con superficies cubiertas entre 30 y 100 metros cuadrados (cocina, dormitorios, galería y baño externo) generalmente en terrenos de 8 metros de frente y 25 metros de fondo.
Casas bien ornamentadas con cornisas, cubredinteles, esquineros de madera, tapajuntas, cenefas de chapa o de madera muy artísticas hechas por hábiles artesanos.
El pintoresco barrio Campamento con sus casitas, su típico empedrado y su característico puente giratorio, mantiene algunas problemáticas por el uso de su emplazamiento para actividades económicas productivas pero de alto perfil contaminante como las empresas areneras y la industria de producción de carbón de coke, ambos emprendimientos nocivos para la salud y el medio ambiente.
A pesar de los cambios, ampliaciones y nuevas construcciones, Campamento mantiene esa impronta italiana en su paisaje tan bonito y nostálgico.