A éste Defensores de Cambaceres nunca hay que darlo por vencido. Cuando jugaba bastante flojito y perdía contra el último del campeonato, Argentino de Merlo, el Rojo sacó fuerzas anímicas, le puso coraje y actitud a su poco vuelo futbolístico y dio vuelta un partido increíble en cuatro minutos. En la agonía transformó una segura derrota en una victoria festejada. Fue 3 a 2, por los goles de Ibañez, Yaniz y de Di Biasi, con un desenlace emotivo, como en aquellas victorias en Zárate y en Barracas Central.
La tarde había arrancado mal para “Camba”. A los 6 minutos, otra vez en una jugada de pelota parada, llegó un centro, y Katip puso en ventaja al local. Esta claro que este tanto le movió la estantería al Rojo que había llegado a Merlo con la intención de pisar fuerte y sumar de a tres. Defensores estuvo muy impreciso con la pelota. Generalmente fue al choque y a la fricción. Entró en el juego del local, que tuvo otra clara oportunidad con un disparo de Katip y una gran tapada de Lacerre.
A Camba le costaba llegar con peligro y casi no inquietaba al arquero local. Era preocupante porque el último del torneo enfrente, aunque en esta categoría no hay grandes diferencias entre los equipos. Pero a los 32 minutos, la fortuna golpeó la puerta por primera vez en la tarde. Miguel López metió un preciso centro desde la derecha, que encontró libre de marcas a Ibañez en el área para conectar de cabeza y establecer el 1 a 1. Con poco, el Rojo llegaba a la igualdad.
En los primeros diez minutos del complemento, estuvo lo mejor de Defensores. Porque lo fue a buscar y llegó con peligro varias veces. Jaime lo tuvo en un par de ocasiones y el arquero Dosoretz le sacaba la posibilidad del desnivel a Miguel López y a un cabezazo de Ibañez. Parecía que el equipo de Borgarelli se lo llevaba por delante. Sólo parecía. Ese mejor momento duró diez minutos. El local volvió a acomodarse el partido y todo se hizo más friccionado. Las llegadas comenzaron a escasear y el encuentro se encaminaba al 1 a 1. Pero faltaba lo mejor de la tarde. En el minuto 39, Benavente cometió penal y Gorosito no perdonó. Remate cruzado al palo derecho de Lacerre que eligió el otro palo. Quedaba poco para el final y parecía que el Rojo se quedaba sin nada. Pero sacó fuerzas de sus flaquezas, fue para delante y encontró lo que parecía milagroso. Sobre los 43´, Soria metió un taco para la entrada de Yaniz, cuyo remate algo extraño hizo entrar la pelota junto al palo derecho. Era el 2 a 2. Cernadas adicionó tres minutos y en el segundo minuto de descuento, Soria escapó por la derecha, metió el centro y Di Biasi, que había entrado a los 26´ por Jaime, estampó el festejado 3 a 2. Lo daba vuelta el Rojo con coraje y con mayor resto físico. Hubo un minuto mas y casi lo empata el local (no hubiera sido injusto), pero el disparo de Ojeda fue desviado por Lacerre.
Ganó el Rojo, sumó tres puntos valiosos y llegó a veinte unidades en el torneo. Tuvo valentía para sobreponerse a la adversidad. Aprobó en entrega y temperamento, pero en el juego, quedó en deuda.-
La tarde había arrancado mal para “Camba”. A los 6 minutos, otra vez en una jugada de pelota parada, llegó un centro, y Katip puso en ventaja al local. Esta claro que este tanto le movió la estantería al Rojo que había llegado a Merlo con la intención de pisar fuerte y sumar de a tres. Defensores estuvo muy impreciso con la pelota. Generalmente fue al choque y a la fricción. Entró en el juego del local, que tuvo otra clara oportunidad con un disparo de Katip y una gran tapada de Lacerre.
A Camba le costaba llegar con peligro y casi no inquietaba al arquero local. Era preocupante porque el último del torneo enfrente, aunque en esta categoría no hay grandes diferencias entre los equipos. Pero a los 32 minutos, la fortuna golpeó la puerta por primera vez en la tarde. Miguel López metió un preciso centro desde la derecha, que encontró libre de marcas a Ibañez en el área para conectar de cabeza y establecer el 1 a 1. Con poco, el Rojo llegaba a la igualdad.
En los primeros diez minutos del complemento, estuvo lo mejor de Defensores. Porque lo fue a buscar y llegó con peligro varias veces. Jaime lo tuvo en un par de ocasiones y el arquero Dosoretz le sacaba la posibilidad del desnivel a Miguel López y a un cabezazo de Ibañez. Parecía que el equipo de Borgarelli se lo llevaba por delante. Sólo parecía. Ese mejor momento duró diez minutos. El local volvió a acomodarse el partido y todo se hizo más friccionado. Las llegadas comenzaron a escasear y el encuentro se encaminaba al 1 a 1. Pero faltaba lo mejor de la tarde. En el minuto 39, Benavente cometió penal y Gorosito no perdonó. Remate cruzado al palo derecho de Lacerre que eligió el otro palo. Quedaba poco para el final y parecía que el Rojo se quedaba sin nada. Pero sacó fuerzas de sus flaquezas, fue para delante y encontró lo que parecía milagroso. Sobre los 43´, Soria metió un taco para la entrada de Yaniz, cuyo remate algo extraño hizo entrar la pelota junto al palo derecho. Era el 2 a 2. Cernadas adicionó tres minutos y en el segundo minuto de descuento, Soria escapó por la derecha, metió el centro y Di Biasi, que había entrado a los 26´ por Jaime, estampó el festejado 3 a 2. Lo daba vuelta el Rojo con coraje y con mayor resto físico. Hubo un minuto mas y casi lo empata el local (no hubiera sido injusto), pero el disparo de Ojeda fue desviado por Lacerre.
Ganó el Rojo, sumó tres puntos valiosos y llegó a veinte unidades en el torneo. Tuvo valentía para sobreponerse a la adversidad. Aprobó en entrega y temperamento, pero en el juego, quedó en deuda.-