La historia de Brian Martínez con Defensores de Cambaceres llegó a su fin. Más bien fue la novela del invierno, con idas y con vueltas y con el final no deseado. Ayer anticipamos que el jugador había llegado a un acuerdo con Ricardo Kuzemka y con los dirigentes para incorporarse al plantel a partir del día de la fecha. Estaba todo acordado. Hasta Brian Martínez había arreglado con un compañero que lo pasaría a buscar para concurrir a la práctica. Hasta ahí todo fantástico. Pero claro, nada de ello ocurrió. A su nuevo compañero de equipo nunca lo fue a buscar y tuvo que tomar otro medio para arribar a Pasteleros, lugar en el que nunca se hizo presente en horas de la mañana, como había prometido. Ni siquiera avisó si había tenido algún inconveniente. Conclusión: ya no se lo espera más y no hay vuelta atrás. Ni el cuerpo técnico ni los dirigentes ya lo quieren en el plantel y dieron por cerrado el caso. La poca profesionalidad de Brian Martínez y la falta de compromiso para con el grupo fueron determinantes. Se hizo el esfuerzo, se buscó el diálogo, pero no hubo caso. La historia de Brian Martínez está cerrada, se lo excluyó de la lista de buena fe y de la manera menos esperada.