domingo, 17 de enero de 2021

LA HORA DE LA VERDAD


Llegó la hora de la verdad. Ahora sí está prohibido dar un paso en falso. Es a cara a cruz. Tres pasos pueden separar a Defensores de Cambaceres de la gloria o de la frustración. El Reducido que se pondrá en marcha mañana no permite dar un paso en falso. Es un solo partido, en 90 minutos y por eliminación directa. El que gana, sigue con el sueño del ascenso, el que pierde deberá pensar en la próxima temporada.

Defensores de Cambaceres y Atlas se enfrentarán desde las 17.10 en la cancha de Atlético Lugano, en Tapiales, y con el arbitraje de Nicolás Kresta. Si hay empate en los 90, la definición será desde el punto del penal.

Como es habitual, el cotejo se podrá seguir en vivo por el canal de You Tube de Revista Tribuna Roja y por Radio Sur (105.1 del dial), desde las 16.30. Se podrá ver en el link  https://www.youtube.com/watch?v=C0XXS8cTexQ

Ninguno de los dos equipos llega bien a este Reducido. Se esperaba mucho más de ambos en el Transición y lejos estuvieron de cumplir las expectativas.

Tal es así que Atlas ganó en Ensenada por 1 a 0 y después no pudo sumar más de a tres, acumulando cinco fechas sin victorias, con 4 empates y una derrota.

Pero el Rojo tampoco pudo consolidar un andar y suma tres derrotas consecutivas.

Si bien el rendimiento futbolístico es muy importante a tener en cuenta, mañana empieza otra historia. Mucho tendrá que ver cómo estará el equipo a la hora de afrontar el partido y como puede resolver las complicaciones que le planteará el rival. Es evidente que el presente futbolístico no es el mejor, pero en este tipo de instancias pueden llegar a privar otros factores. Habrá que convencerse que se puede dar pelea y se necesitará una concentración al máximo para evitar cometer errores que costaron goles y dejar unidades en el camino.

En este tipo de instancias, no se puede arriesgar demasiado. Primero hay que asegurar el cero en el propio arco y después ser preciso cuando se presenten las ocasiones, en un contexto de encuentro que puede ser trabado.

Atlas tiene dos centrales fuertes, un volante por derecha como Keving González con mucha dinámica y un delantero de cuidado como Ybares. No tiene tanto juego y busca el pelotazo largo como recurso.

Camba tiene mucho para mejorar, pero fundamentalmente convencerse y mentalizarse que está ante una oportunidad que no permite más pasos en falso.

Es continuar con el sueño o masticar bronca y pensar en otra temporada más en la última categoría del fútbol argentino. Así de duro y de concreto.