Las rachas están para romperse en algún momento. Tarde o temprano se terminan. Hay equipos que suelen ejercer una cierta paternidad sobre el otro pero nada es eterno.
A eso se aferra al Rojo que ha sufrido cada vez que le tocó enfrentar a Atlas en los cinco cotejos que se midieron.
En la temporada 2018/19, fue derrota por 5 a 1 en el Puga y 0 a 0 en Ensenada con dos hombres más. Al torneo siguiente, otra caída como visitante por 2 a 0 y una dura derrota como local por 4 a 1. En el Transición que recientemente concluyó, el “Marrón” ganó 1 a 0 en el “12 de Octubre” en la primera fecha. ¡Es el momento de quebrar la maldición y esta es la mejor ocasión!