La
determinación llegó luego de una segunda recorrida donde comprobó que había
algunos sectores anegados por las
intensas lluvias que azotaron nuestra ciudad
después de las siete de la mañana. Había lugares donde ya se había acumulado el
agua y la pelota no picaba.
Petrussa
hizo una primera inspección poco antes de las 10 de la mañana y ya había
advertido dificultades para el desarrollo del encuentro. En ese momento, Rubén Agüero
observaba atentamente lo que ocurría dentro del mismo campo de juego.
Ya en
la segunda inspección, con la presencia de los dirigentes Jorge Costa y Cristian
Comas, se tomó su tiempo, recorrió diversos sectores y dijo que no se podía
jugar.
Mientras
tanto, algunos colaboradores del rojo utilizaban secadores de manos para sacar
el agua acumulada, especialmente en el área que da a la tribuna de calle
Quintana. Al mismo tiempo, los jugadores ya habían comenzado la entrada en
calor.
Pero
la lluvia lo frustró todo y no hubo fútbol en el “12 de Octubre”.