Pese
a que el encuentro finalmente no se pudo llevar a cabo, la Policía montó el
operativo a la espera de lo que iba a ocurrir. No obstante se mostró celosa en
su procedimiento al ser un encuentro a puertas cerradas. Como ocurre en cada
cotejo que se juega en Ensenada, hubo una recorrida de un perito de explosivos.
Y, además,
efectivos de Policía recorrieron las cabinas para verificar que los
pocos periodistas allí presentes estuvieran debidamente autorizados.