lunes, 30 de marzo de 2020

LIO EN QUILMES

Por Juanchi Guerra
ANECDOTAS DEL ROJO
 Luego de permanecer 10 años en la C desde 1960, tuve que volver a ver a mi querido Defensores perder la categoría y desde 1971, justo cuando se cumplieron 50 años de su fundación, tuvo que remarla para volver a ganar un torneo y volver a la C. Eso se logró recién en 1976 cuando con un equipo comandado por el Bocha Flores, que estaba de mediados del año anterior, con casi todos sus mismos futbolistas logra lo que se le venía negando: el regreso a la C. En el partido más importante del año nos encuentra en cancha de Argentino de Quilmes. Dada la real importancia de dicho partido, aún siendo de la D, se recaudaron casi 259.000 pesos a un valor
de la entrada  de $ 5 moneda nacional:  una multitud.
El micro con los jugadores salió del club a las 13, total era cerca. Con todas las informaciones que teníamos de temor a que pase algo a los jugadores, la Comisión Directiva dos días antes se llegó hasta la comisaría y pidió seguridad y se le brindó. Se llevaron 6 agentes en el micro en el que iban varios dirigentes, entre ellos Chengo Martínez, Roberto Verdu, Luis Viegas.
El presidente Rubén Roselot con su madre ya muy grande (quien le pidió expresamente ver ese partido), mi hermano  y yo viajamos en auto detrás del micro. Atrás siete colectivos fletados por el club. Todo era algarabía mientras viajamos. Cuando llegamos a la cancha del Mate,  los dirigentes de Berazategui no recibieron como correspondía a nuestros simpatizantes. Los querían ubicar en un costado, a metros de su hinchada. Por supuesto dijimos que no y después de varias charlas nos ubicaron detrás del arco que da a Capital Federal. Ya con el correr del partido tuvimos varios
inconvenientes. Fueron agredidos varios hinchas del Rojo, entre ellos mi hermano y también a mí me pegaron un golpe que me hizo trastabillar y perder los anteojos que usaba en esos momentos. La policía que fue con nosotros no daba abasto de discutir y separar a nuestra gente que siendo minoría no tuvo más remedio que pelearse. Hubo balas de goma de los dos lados y gases lacrimógenos. El partido no se suspendió, se calmaron los problemas y se siguió con mucha pasión de los dos lados. Defensores en un momento se encontraba en ventaja y en una jugada muy confusa lo golpearon al arquero Martinicorena, que tuvo que abandonar el campo de juego y en su lugar ingresó el querido Raúl Giulietti quien usaba peluca. En un momento del cotejo, ya cuando estábamos empatando y terminando el cotejo,  se le cayó la peluca, durando solo unos segundos y muy poca gente se dió cuenta de eso. Así terminó una tarde con muchas cosas que sucedieron pero nosotros no podemos olvidarnos que Defensores tenía un muy gran equipo que nos llevó  a la vuelta a la C. Pero eso era ya será otra historia