Por Jorge Daniel Testori
Primero se oían sus gritos desde lejos, luego se veían sus
ademanes agitando los brazos como un molino y por último llegaba él, era
siempre de los primeros en llegar o el primero, tanto a las reuniones de
Comisión Directiva como al estadio para los entrenamientos y partidos o al
micro para las salidas con el plantel de fútbol a jugar de visitantes.
José Raúl Martínez, "El Chengo", nuestro amigo
vehemente que ponía todo su corazón y su fuerza
por el Rojo de Cambaceres y
nada dejaba por hacer para mañana.
Uno de nuestros dirigentes que contagiaba entusiasmo, que
jamás se callaba, protestón y querible.
Un hombre con miles de amigos, de típica familia ensenadense
y a quien con solo ver al "Chengo", ya estaba viendo un pedazo del
Club Defensores de Cambaceres.