Arrancó 2021 y será un año muy especial para toda la familia del Rojo. Es un año histórico, es el año del Centenario de la institución, con todo lo que ello implica. Será un año de festejos y desafíos.
El primer objetivo que se plantea, ya en este mes de enero, es sostener la ilusión de soñar por el ascenso y volver a la Primera “C”. Parece una empresa complicada, por los últimos resultados y las actuaciones del equipo. Pero la ilusión está latente y se vendrán semanas intensas para ir decididamente por ese logro.
También
será un año de culminación e inauguración de obras importantes. Se espera
terminar la pensión en el “12 de Octubre” y la concreción del Polideportivo,
sin dudas uno de los emprendimientos más ambiciosos de la historia del club.
Será la obra que sume actividades deportivas y cambie el perfil social y
deportivo del club. Permitirá la llegada de nuevas disciplinas, nuevos socios y
el acercamiento de la familia.
2021
también será el año de renovación de autoridades. Se necesita un recambio
generacional. Entendemos que el Dr. Raúl Zamponi ya cumplió un ciclo importante en el
club y debe dar paso a gente más joven y con renovadas ideas. El gran desafío
es aunar a la familia Roja, sumar nuevas voluntades y afianzar la relación con
el municipio. Es allí donde el Rojo debe aspirar al crecimiento como club, como
lo hizo la ciudad.
El
Centenario debe ser un factor de unión de todos los sectores. Hay que hacer una
convocatoria a socios, hinchas, ex directivos, ex jugadores, vecinos. Todos
tienen que ser parte de este acontecimiento único en la vida del club y
organizar los mejores festejos posibles, con la participación de todos. Quién
no lo entienda de esta manera, estará equivocando el camino.
Los
desafíos están planteados. Solo se pueden lograr con la verdadera participación
de todos.
Alzamos
las copas para que, más allá de eso, pase cuanto antes esta maldita pandemia, y
tengamos un año mucho mejor que el que acaba de concluir.