Eduardo Borgarelli se mostró muy conforme con lo hecho por Defensores de Cambaceres en la memorable noche de Vicente López. Es consciente de que hay mucho camino para recorrer, pero que se dio un paso importante desde lo anímico.
El DT Rojo sostuvo que “habíamos trabajado en lo anímico y mentalizamos al jugador de que saliéramos a ganar este partido. Atlanta tuvo oficio en el primer tiempo, pero Cambaceres había sido un poco más. La imagen cambió, nunca renunciamos a ganar. Fuimos muy superiores en el segundo tiempo. Nunca pensé que el partido estaba definido. En el entretiempo les dije a los muchachos de que el 2 a 0 era mentiroso pero que estaba orgulloso porque habíamos hecho una tarea digna y estábamos jugando con el mejor equipo de la categoría. Demostraron que no íbamos a darnos por vencidos. Hicimos tres goles y hacía mucho que eso no pasaba”.
Luego sostuvo que “todo el mundo me decía que hay que darle una inyección anímica. Esta es la mejor. Pero no hay que conformarse con esto. Ahora que jugar con Tristán Suárez, meter de esta misma manera y jugar. Y buscar el arco contrario. Siempre dije que lo íbamos a atacar. Esto me pone muy contento por los jugadores. Ellos y la gente venían muy golpeados. Espero que esto sirva para unir aún más a este Cambaceres que tanto nos necesita”.